Estrellas de las redes sociales: publicidad y psicología detrás del glamour

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Hoy en día,Kim Kardashian es conocida por casi todo el mundo que se ve perjudicado por los medios de comunicación. Cuando escribí mi primer libro, hace tres años, todavía tenía 800.000 seguidores en Instagram. La revista Forbes acaba de publicar el titular «Los nuevos mogollones móviles». Hoy, Kim tiene 100.000.000 de seguidores. Eso supone 2,75 millones de nuevos seguidores al mes o 91,8 mil al día, o un nuevo fan cada segundo. Un enorme crecimiento que le asegura a ella y a su familia unos altos ingresos. Según cálculos objetivos, gana 1.000.000 de euros con cada foto que publica, con una sola colocación de producto. En la alfombra roja, los zapatos, el vestido, las joyas y el bolso se acumulan rápidamente. ¿Por qué las marcas gastan tanto dinero? Los embajadores de marca siempre han sido una parte importante de la mezcla de marketing de las grandes empresas. La publicidad es honesta, llega a la gente directamente, a través de sus ídolos, y promete un CPM (precio por mil contactos) más atractivo que, por ejemplo, la publicidad clásica en prensa o televisión.

Key Facts -
La estrella de Instagram (y de la televisión) Kim Kardashian
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Psicología publicitaria en Instagram: El sencillo principio del éxito
Youtube: El valor añadido como garantía de éxito en los vídeos
Conclusión: ¿Competencia? No. Instagram y Youtube son únicos

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Psicología publicitaria en Instagram: El sencillo principio del éxito

La sociedad se caracteriza por considerar que el desarrollo ascendente es deseable para todos. Para las clases sociales más bajas, esta circunstancia es incluso el propósito que define la vida. Las nuevas tendencias siempre se llevan primero en las clases superiores. Si las tendencias se debilitan, las clases bajas también adoptan el «simbolismo» de las altas. Según esta teoría, la moda en promedio permite sacar conclusiones directas sobre el propietario y su riqueza. Los que se suman a las tendencias y las modas desde el principio se consideran creadores de tendencias. Por lo tanto, las estrellas de Instagram rara vez son personas de clase baja que no pueden permitirse nuevas modas. Las tendencias las marcan las clases altas. Las redes sociales están revolucionando la comunicación, pero no la imagen clásica del éxito. Las clases bajas emulan a las altas. Las redes sociales como Instagram venden sueños. Seguimos a personas que nos inspiran y a ídolos a los que emulamos. Nos llevan a playas de ensueño y a destinos lejanos que la mayoría de la gente nunca verá. No tienen que madrugar a las seis, su trabajo es ir a comprar una o dos veces por semana. Entre medias, preparan apetitosos cuencos de muesli con cinco tipos diferentes de bayas. Y después de Los Ángeles y Nueva York, se va a Bali.

Youtube: El valor añadido como garantía de éxito en los vídeos

Si quieres seguir a tus ídolos con más detalle, puedes hacerlo en YouTube. Ya no se trata sólo de instantáneas de las vacaciones o de los eventos de los blogueros, sino de contenidos multimedia con valor añadido. Los blogueros muestran a sus seguidores nuevos consejos de maquillaje o productos, los gamers explican nuevas tácticas en los juegos o comentan otros juegos, mientras que otros presentan las noticias en un envoltorio completamente nuevo cada semana y sirven todo tipo de géneros durante la semana. Los youtubers son productores de espectáculos con un nuevo formato. Crean el contenido, a menudo hacen la edición de los vídeos ellos mismos y se promocionan. Los youtubers dan a sus usuarios un valor añadido, por lo que los vídeos se consumen durante mucho tiempo. Un vídeo típico dura entre nueve y diez minutos. La duración es relativamente larga y los usuarios están absolutamente involucrados durante el vídeo. Por lo tanto, los youtubers son menos fáciles de sustituir. A diferencia de Instagram, que ofrece miles de canales similares.

Conclusión: ¿Competencia? No. Instagram y Youtube son únicos

En el pasado, las redes eran iguales. Hoy en día, las redes individuales están diferenciadas. Los usuarios deciden activamente si buscan un entretenimiento a corto plazo o un entretenimiento e información más largos o profundos.

 

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